A mí me pasa como a Manu Chao y a los que decidieron escribir sobre el cristal de la terraza de la discoteca Moom 57 , el ya tan conocido «Me gusta La Coruña, me gustas tú»…
Partiendo de esta premisa, cualquier lugar desde el que pueda disfrutar de la bella ciudad de A Coruña y su mar, me gusta.
Era una tarde de julio, que hoy parece tan lejana, que el sol brillaba pero no era uno de nuestros mejores días. Teníamos dos opciones, quedarnos en casa o partir hacia algún lugar en el que el sol y el mar nos diesen el impulso necesario para pensar en que una contrariedad, es solo eso, una contrariedad.
Ya en el coche y en dirección a la playa de Riazor, la idea de una cerveza en la terraza de la Moom, nos pareció el mejor de los planes.
Aún cuando hasta ahora no había desvelado este paseo, puesto que dejé pasar el verano y creí que a estas alturas el clima de A Coruña, no os dejaría «terracear» sin pasar frio, la predicción del tiempo para este fin de semana nos ha preparado un «sol» precioso. Así que me he dicho….¿Y si hay alguien que también necesita algo que le devuelva la sonrisa y leyendo el post le puedo ayudar?
Creo que en el fondo y aunque me resisto, tengo alma de Coach…y cada día, pienso que debo hacer algo con ésto, es decir, dejar de postergar (esta palabra que tanto le gusta a mi mentora Cecilia) y ponerme manos a la obra…Pero bueno, esto será tema para otro día…
Así que os animo a visitar la Moom -que además, a algunos de mi generación le traerá a la cabeza muchos recuerdos, ¿quien no tomó alguna copa o echó algún baile en la discoteca GREEN?.
Una terraza abierta al mar desde la que podréis disfrutar de toda la ensenada, de la Torre de Hércules, pasando por la Domus hasta el Milenium. ¿Se puede pedir más?.
Flores, cómodos asientos para disfrutar de la compañía y música de fondo…Adelante!!
Pero la tarde no había acabado y como todavía brillaba el sol, decidimos continuar nuestra andadura y adentrarnos en el paseo marítimo, hasta O Portiño.
Dejamos la terraza de O’Portiño a nuestra derecha y bajamos hasta el puerto y la pequeña playa para por último, tomar una Estrella Galicia con el Atlántico de fondo.
Y así, nuestro «día rojo» como el de Audry Hepburn en Desayuno con diamantes (en el que solo la visita a Tiffanys lo podía cambiar, pues creía que nada malo le podría ocurrir en un lugar tan bello…), a nosotros nos pasó lo mismo con nuestro Atlántico, A Coruña y el Sol.
Por último, algo que cada verano me saca una sonrisa y que huele a mar. Los anuncios de Estrella Damm. En este caso os dejo el del 2014.
Porque «nunca choveu que non escampara». Espero que hayáis disfrutado.
Por cierto, desde agosto Moom 57 ha ampliado familia. En el edificio del Playa Club han inaugurado «Bar Atlántico 57» y «La Boite». Espero poder hablaros pronto de ellos.
MOOM 57. Paseo de Ronda 57. Abre viernes y sábados a partir de las 17.00h y domingo a partir de las 16.00h
O’PORTIÑO. Calle del Puerto, 2. Abre de lunes a jueves a partir de las 16.00h y de viernes a domingo a partir de las 12.30h
Soy gallega y pertenezco a una familia de gallegos, con todo lo que eso implica. Es decir, que nos gusta celebrar todo y hacerlo alrededor de una mesa.
Así es como un festejo familiar nos llevó por segunda vez a Arbore da Veira. Ya en diciembre de 2012 y casi recién inaugurado, estos mismos cuatro comensales pisaron por primera vez este local. Desde entonces teníamos pendiente el repetir.
Al frente del restaurante, Luis Veira, que tras su paso por el Alborada y haber conseguido una estrella michelín, abría su propio local. Al año de la apertura, este cocinero ya conseguía una segunda estrella.
En cuanto a su cocina, no puedo decir que sea apta para todos los bolsillos, pero si un día queremos darnos un pequeño capricho y visitarlo, será difícil que no satisfaga el gusto de todos, pues aun cuando se trata de una cocina de mercado elaborada y un poco sofisticada en la decoración de los platos, la materia prima es de la tierra.
Así que a través de un largo desfile de platos, en una vajilla preciosa, que cambia para adaptarse a cada preparación, el tiempo parece volar.
Una esmerada atención por parte de los camareros y un ambiente muy relajado, ayuda a que sea un lugar muy adecuado para aquellos que os guste la tertulia o para aquellos que quieran sorprender a su pareja en un lugar íntimo.
En cuanto a la decoración, elegante y urbana, mesas de roble que no se cubren con manteles para que disfrutemos de ellas, cuadros de naturaleza y una iluminación tenue que compensa la falta de luz natural.
Cinco o seis mesas, acompañadas de una zona de sofás a la entrada como opción para tomar el café y los petit fours y un reservado compuesto por una mesa larga con cabida para 8-10 personas.
En cuanto a la carta, podéis elegir entre dos menús degustación «Menú Raíz» y «Menú Arbore». En nuestro caso y por tratarse de una cena, elegimos el primero que es un poco más corto y consta de Snacks, 8 Platos, 2 Postres y Petif Fours.
Una vez acomodados en nuestra mesa, y tras ofrecernos agua a la que añadían un trozo de piel de naranja, lima o limón, según la elección de cada comensal, nos sirvieron los Snacks.
El ritmo perfecto, no hay esperas pero tampoco agobios que fuercen a terminar el plato antes de lo que uno desea.
Así es que por fin y tras tanto preámbulo, os dejo con el Menú RAIZ y una canción que creo que os gustará
Pajaritas con tomate
Esferificación de Aceitunas y de Mojito con aguacate
Por cierto, mis disculpas al restaurante y a los que me seguís, si no soy capaz de reproducir fielmente los nombres de todo lo que comimos. Yo no lo hice, pero os recomiendo que pidáis una copia escrita del menú para poder seguir mejor la secuencia de platos.
Y mientras íbamos a por el tercer aperitivo, nos sirvieron un Gin Fizz. Aquellos que tengáis un sifón podéis atreveros este verano porque es una bebida muy refrescante y de sabor exquisito (ginebra, limón, soda y almibar).
Mantequilla de tomate y pimentón.
Bocaditos de anchoa y queso, rulo de bacon y roca de calamar.
Y así llegamos al primer plato,
«Tomate con Tomate «. Tomate relleno de helado de tomate y sopa de tomate.
«La cereza que se cayó del árbol». Foie con puré de cereza y polvo de albahaca
Navaja con pil pil. Acompañada de una crema de merluza y espuma de pimientos de padrón.
Zamburiñas con crema de patata trufada y caviar.
Un guiño a la cocina china con los «Dim Sum rellenos de cordero y cigala con salsa de jamón ibérico»
Cococha de bacalao con Yusu (cítrico de origen asiático)
Parrillada de verduras con boletus y yema de huevo
Merluza a 65ºcon jugo de cocido y repollo
Costilla de cerdo ibérico
Y como cierre, los postres:
Crema de queso San Simón, remolacha y cereza
Torrija con crema de cardamomo.
Y cuando creímos que todo había acabado, unos petit fours muy especiales. Espectáculo en vivo y en directo.
Y más detalles, reloj de arena para indicar el mejor momento para tomar la infusión y azúcares aromatizados.
A nosotros nos encantó y creo que bien merece una visita, ya me contaréis.
Ya hace bastante tiempo que Marcelle estaba en nuestra lista de pendientes para una jornada con nuestras sobris. Tras haberlo visitado casi todos nuestros amigos con niños y la mayor de mis sobrinas en una excursión escolar, ya casi solo quedábamos la peque y nosotros por conocer este zoo tan cercano a casa.
Marcelle para los que no hayáis estado nunca está en Outeiro de Rey, a unos 7 kilómetros aproximadamente de Lugo.
Bajo un lema precioso «Conocerlos para quererlos», el objetivo de Marcelle es educar para proteger la fauna silvestre y conservar la naturaleza. Para ello, además de abrir sus puertas al público en general en horarios y tarifas que podéis encontrar en su web marcellenaturaleza.com , en Marcelle organizan visitas guiadas para colegios, campamentos y multitud de actividades para que, sobre todo los más peques, aprendan divirtiéndose.
Reconociéndose mutuamente
Nuestra visita fue este pasado jueves Santo y aún cuando mucha gente había aprovechado como nosotros las vacaciones y el buen tiempo para ir a Marcelle, salvo el momento de encontrar aparcamiento y la espera en el chiringuito para comprar la comida, el resto de la visita la pudimos hacer de una forma bastante tranquila.
Una vez ya dentro del parque y con ayuda del plano que entregan con las entrada podéis hacer todo el recorrido jugando a buscar las diferentes especies de animales. Ayuda mucho para los peques el que además de los nombres de los animales también aparece un dibujo que les ayuda a identificarlos.
Tras los pasos de mi equipo
Aquí tenéis un pequeño reportaje de algunas de las especies que podéis encontrar en el parque.
Canguros. ¿Sabéis que pueden llegar a alcanzar una velocidad de 50 km/h?
Suricatas. ¡Que rápido los reconocieron!. Es que aparecen en la película El Rey León de Disney
Avestruces. Los mas elegantes del parque
Capibara….sin palabras
El conocido…Burro fariñeiro
El más visitado, el oso.
El bisonte. Presenciamos una pelea entre dos e impresionaba. Al final uno se rindió y se retiró
A ver si sois capaces de ver al más agil. Estaba descansando sobre una rama. El lince.
Por cierto, para los que vayáis con niños pequeños, no tenéis que preocuparos porque todos los animales y especialmente los peligrosos como el oso, están detrás de zonas valladas y con pastor eléctrico por lo que en ningún momento intentan acercarse. En el caso de los domésticos como las cabras, no tienen pastor y los niños se acercan a darles de comer -aun cuando las normas del parque lo prohiben-.
En muchas zonas hay miradores para contemplar los animales a la sombra y hacer un pequeño descanso.
Y además de naturaleza y animales, en Marcelle también tiene un lugar importante el arte. Las esculturas talladas principalmente en madera y piedra están distribuidas por todo el parque, siendo algunas de ellas el lugar elegido por los niños para el descanso y la foto.
En cuanto a lo cuidado que está el parque y las zonas con animales, en general nuestra percepción fue buena. Los animales disponen de espacios amplios y arboles y estanques que intentan recordar su hábitat. Según la información proporcionada por el parque, todos ellos vienen de otros zoos, centros de recuperación o de rescate pero nunca de capturas de animales en libertad.
Y para los peques de la casa también hubo un rato para el ocio, en la cabaña de los indios y a modo de cuento y jugando, les enseñan su historia durante una hora. Así que mientras los adultos descansábamos al lado del río, los peques se divertían.
El rio Miño a su paso por Marcelle
Y por si os preguntáis como organizar la comida en el parque. En Marcelle hay un restaurante en forma de cabaña de madera que tiene un aspecto muy acogedor. Nosotros no pudimos probarlo porque cuando llamamos para reservar ya estaba completo.
Entrada al restaurante
Pero existen otras opciones, como el chiringuito, dentro del parque. Allí podréis comprar sandwiches, bocadillos, ensaladas y después comerlas en alguno de los merenderos cubiertos.
Por último, la opción de picnic. Esta permitido el introducir comida en el parque y disfrutar de la misma sobre la hierba o en los bancos y mesas dispersos.
Grupos de gente disfrutando del picnic
Nosotros decidimos probar el chiringuito y a pesar de tratarse de una cómida rápida y preparada previamente, no está mal. Pedimos 3 ensaladas de pasta, un bocadillo de tortilla, una ración de empanada y cuatro bebidas y pagamos por todo ello 21.50€. Lo que si os recomiendo, es que antes de pedir preguntéis por los tiempos de espera porque en caso de optar por un bocadillo vegetal o una ración de espaguetis, vuestra comanda se podría retrasar en 20 minutos.
El chiringuito al fondo. Delante mesas con sombrillas para comer
La ensalada de pasta. Muy apetecible para los niños.
El bocadillo de tortilla de patata para que durante un rato los adultos nos sintamos niños
Una vez finalizada la visita y todos encantados, cogimos de nuevo el coche rumbo A Coruña. Nos esperaban las palabras encadenadas, las palabras sueltas, el veo veo…y la sensación de haber pasado un día muy feliz.
Dirección:Marcelle 6, San Martin de Guillar, 27154, Outeiro de Rei- Lugo.
La primera vez que escuché a cerca de este destino fue hace más de dos años en la revista Elle en donde se dedicaba un artículo a Comporta que decía «El paraíso está al lado». Guardé el recorte con la intención de ir algún día y la semana pasada por fin llegó el momento.
Playa de Comporta
Comporta Café. Playa de Comporta
Comporta es el nombre de una aldea y una playa situadas en la costa del Alentejo o también llamada la «costa azul portuguesa». Para la mayoría de nosotros, la gran desconocida. Para los que habitualmente la frecuentan, un paraíso salvaje de playas de arena doradas infinitas y extensos arrozales.
Una inmensa línea de costa que se extiende entre la punta de Tróia y el cabo de Sines, a una hora y media de Lisboa en dirección Algarve.
Se trata de una zona protegida como reserva ecológica, natural y agrícola y es por ello por lo que es difícil encontrar bloques de apartamentos de hormigón y grandes alturas. De hecho, la mayoría de la gente que veranea aquí o tiene casa o la alquila pues apenas hay hoteles, salvo los de la península de Troia.
Playa de Comporta
Zona de arrozales. Pueblo de Comporta
Zona de arrozales. Pueblo de Comporta. Vistas desde el Restaurante Museu do Arroz
Os cuento un poco de historia haciendo referencia a la familia Espirito Santo, propietaria desde el año 1955 de 12.500 hectáreas de terreno en Comporta. En el año 1975 sus terrenos fueron nacionalizados y los recuperaron nuevamente en el año 1991, fecha en la que fundaron A Herdade da Comporta, una empresa dedicada al desarrollo agrícola y turístico de la zona con el objeto de crear empleo y dar valor a la zona con la premisa de cuidar de este entorno protegido. Su labor hace que Comporta esté siendo conocida a nivel internacional como un destino vacacional diferente. Dentro de los proyectos de A Herdade está la apertura para el 2015 de un hotel de la Cadena Amán (será el primero que esta cadena asiática de lujo abre en la península ibérica) con dos campos de golf.
Y siguiendo este espíritu de la Herdade, tenéis unos exclusivos alojamientos llamados casas na areia y coocon lodges. Ambos, cabañas de madera totalmente integradas con el entorno, con piscinas y porches que asoman a los arrozales. Solo un dato, se tratan de alojamientos para un público muy pudiente, la estancia en temporada alta de una noche en las primeras ronda los 500€ y en las segundas los 200€.
Casas na Areia (foto de web)
Cocoon Lodges (foto de web )
Durante nuestra visita a la bodega de A Herdade, las personas que la atendían nos informaron de otros alojamientos a un precio mas asequible y en forma de casas de alquiler Casas da Comporta y Herdade de Montalbo y para los que os guste más un hotel, en Troia nos recomendaron el Hotel Aqualuz y el Troia Design Hotel. Este último de nuevo para los que se quieran dar un capricho y disfrutar de su piscina en el ático.
Troia Design Hotel (foto de web). En Troia es el único lugar en el que encontraréis este tipo de construcción.
En nuestro caso y por desconocimiento todavía de esta zona, nos instalamos en Cascáis y desde allí visitamos Comporta y sus playas. Para los que os animéis con esta escapada, os recomiendo instalaros en alguno de los alojamientos anteriores o cercanos a ellos pues realmente merece la pena pasar unos días allí.
De todas formas y para animaros también a un visita a Cascáis de la que os hablaré en otro post, os dejo una foto de nuestro hotel (muy recomendable para los que quieran huir del bullicio del centro y les guste el relax y el golf).
Vivamarinha Hotel
Por cierto, tengo que avisaros que una vez que abandonéis la autopista que os trae de Lisboa a Comporta (A2 destino Setúbal), el paisaje se vuelve completamente diferente, carreteras estrechas, bosques de pinos y alcornoques, dunas de arena y poco después arrozales. Ocres, verdes y una vez llegados al pueblo, casas encaladas con cubiertas de teja y en puertas y ventanas, azul.
Color y luz es sinónimo de Comporta. Y por fin llegamos… ansiosos de comprobar que todo lo que habíamos leído estaba allí, tiendas de estilo bohemio-chic, el Museu do Arroz, la Bodega Herdade da Comporta, el restaurante del Museu en donde comeríamos un buen plato de arroz y …. la primera impresión que recibimos, fue la de tener ante nosotros un lugar precioso y muy tranquilo pero ¿donde estaba todo lo que habíamos leído?
Nido de cigüeñas propio del paisaje de Comporta
Calle típica de Comporta. Encima del campanario, la cigüeña
Casas blancas y azules y teja. Jardín en la entrada. En Comporta se vive mucho fuera de las casas.
Aparcamos el coche y comenzamos a pasear y de repente… un escaparate como recién salido de una revista de decoración …la habíamos encontrado, se trataba de «Lavanda» (Largo de San Joao, Comporta) una antigua panadería convertida en tienda de ropa y decoración.
Escaparate de «Lavanda». Tienda de decoración y ropa.
En Lavanda, todos son detalles. En la entrada, una barra en la que puedes tomar desde una copa de champagne a un zumo de frutas mientras escuchas de fondo una música al estilo «Café del mar» o probar con el banco de fuera y divertirte con el ambiente de la zona. Es increíble la de gente que se acercaba hasta esta tienda y las vecinas.
Pequeña terraza en «Lavanda»
Vestidos y camisas de algodón en colores pastel, los Caftanes mas bonitos que he visto, complementos para el hogar, bisutería y marroquinería hecha a mano-mucha de ella importada de Brasil-, marcas internacionales como Antik Batik… De nuevo, los precios no son aptos para todos los bosillos pero en mi caso, un bonito collar de piedras verdes se vino para A Coruña.
Pequeño lugar en la entrada donde pinchar música y beber una copa
Y bueno, para que os hagáis una idea…no es la única…
RICE, decoración, moda y accesorios. La revista Habitania le dedicó un artículo en Septiembre 2013.
En RICE podéis encontrar antiguas herramientas de la fábrica de arroz convertidas en mobiliario de hogar
Y para los amantes del vino, la bodega de A «Herdade da Comporta». Para los que vayáis con tiempo tenéis visita a la bodega con cata de vinos por 7€. Nosotros al no poder hacerlo, nos dejamos asesorar y nos trajimos A Coruña su recomendación, Tinto Herdade da Comporta del 2009.
Vinos de Comporta como parte de la ruta de vinos de la península de Setúbal
Después de la visita a la bodega y ya hambrientos nos dirigimos al Museu do Arroz en donde en un edificio anexo, está el restaurante que lleva el mismo nombre y donde comeríamos un rico arroz. No os perdáis su arroz de pato, bacalao o marisco. Nuestra opción fue el de bacalao. Una ración abundante y servida en cazuela de barro (precio medio sin vino y con un aperitivo 30€).
Si es verano y no odiáis los mosquitos, la mejor opción es su terraza con vistas a los arrozales. Puesto que era mediodía y hacía calor, tomamos el aperitivo en la terraza y después comimos dentro.
Antigua fábrica convertida en museo
Entrada al restaurante
Terraza
Comedor en la terraza
Comedor interior
Arroz caldoso de bacalao. La foto no le hace justicia. El caldo estaba riquísimo y los trozos de bacalao eran de muy buen tamaño y abundante.
Parte de la vajilla usada en vitrina
Una decoración muy cuidada y un ambiente cálido que invita a quedarse.
Espacio para tomar un café o una copa
Eso sí, en Comporta no se puede esperar el ambiente de terrazas al que estamos acostumbrados. Allí por lo que cuentan, si tienes la suerte de tener una casa o estar invitado lo mejor son las cenas informales que se organizan y sino es así, siempre nos quedará retornar al Museu do Arroz después de un día de playa para cenar o tomar una copa y disfrutar de sus fiestas de verano.
Y …tocaba playa, nuestra elección fue la de Comporta aun cuando también son muy recomendables las cercanas Praia do Pego y Praia do Carvahal.
Antes de seguir leyendo …una pequeña recomendación: escuchar Stolen Dance de Milky Chance. La escuché por primera vez unos días antes del viaje y trasladó a otro lugar. Llegué a la playa de Comporta y sonaba en el chiringuito de playa…
Dejadla sonar mientras veis las fotos…
La playa…
El chiringuito del Comporta Café..puffs de colores, sombrillas, gente con ganas de descansar y tomar algo rico. En nuestro caso un café, pero fijaros qué café para tratarse de un chiringuito de playa..y en este caso, a un precio muy razonable,2€ la consumición.
Comporta Café. Una terraza para el gin tonic y dentro, mesas para degustar un buen pescado de la zona..
Detalle de Barbie y Ken a la entrada de los baños.
Y como imagen para poner fin a nuestra jornada playera, el mar…
Como siempre, espero que os guste!!
Por cierto, teneis un lugar similar al Comporta Café en a Praia do Pego llamado «Restaurante da Sal».
al salir de trabajar 